Cuando llegan los romanos los iberos abandonan su lengua a favor del latín. Sin embargo, por causa de los romanos acuñan monedas con inscripciones íberas. En el anverso estaba una cabeza de divinidad y en el reverso caballeros con lanzas, caballos sin jinete o caballos marinos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario